Tragedia en Austria: joven asesina por celos a 5 personas en Kitzbühel
La policía halló los cuerpos sin vida de las cinco víctimas en la vivienda de la exnovia del joven.
"El hombre de 25 años puso una pistola y un cuchillo en el mostrador, alegando que acababa de matar a cinco personas".
Así narró Walter Pupp, jefe de la Oficina de la Policía Criminal del Estado federado del Tirol, cómo un hombre se presentó en una comisaría de Kitzbühel el domingo y contó los asesinatos de su exnovia, de 19 años, los padres de ella, el hermano (de 25) de ella, así como a su nuevo novio (de 24), en un caso de violencia machista.
La policía halló los cuerpos sin vida de las cinco víctimas en la vivienda de la exnovia del joven, donde éste, según habría relatado en el interrogatorio de las autoridades, se presentó de madrugada, aparentemente con la intención de hablar con ella, pero su padre no lo dejó entrar.
El hombre regresó a su casa para buscar una pistola de su hermano y regresó con ella a la vivienda, donde cometió el múltiple crimen, matando primero al padre de la chica cuando éste le abrió la puerta.
Luego disparó contra el hermano y la madre de la joven, que dormía junto a su nuevo novio en un apartamento de la vivienda, cuya puerta estaba cerrada, por lo que el presunto asesino se trepó a un balcón para acceder de allí a los aposentos y matar a la pareja.
Según la policía, la relación del hombre con su exnovia se había roto hace dos meses, y pocas horas antes del crimen, en la noche del domingo al sábado, testigos presenciaron una disputa entre él y el nuevo compañero de la chica en un restaurante de la ciudad.
Todas las víctimas fueron asesinadas por disparos. El presunto homicida, "conocido por ser una persona tranquila" que no tenía antecedentes criminales y del que "no se podía esperar" un acto violento, "admite su culpa y se muestra arrepentido", indicó Pupp.
Las autoridades han ordenado la autopsia de los cuerpos de las víctimas.
Este acto de violencia machista que acabó con una familia entera ha conmocionado a toda Austria y en especial a los 8.000 habitantes de Kitzbühel, un enclave alpino de apariencia idílica situado en el este del país cuyo Ayuntamiento izó hoy mismo una bandera negra en señal de luto.
Una "atrocidad" como esta no se recuerda en Kitzbühel, dijo el alcalde de la localidad, Klaus Winkler, tras hablar de una "tragedia sorprendente e increíble", pues ambas familias -la de las víctimas y la del presunto asesino- eran muy apreciadas en la región.
EFE